viernes, 28 de diciembre de 2007

Pakistán atribuye a Al Qaida el asesinato de Benazir Bhutto


Cientos de miles de paquistaníes despiden a la líder del PPP en sus honras fúnebres con acusaciones contra el presidente Musharraf .


Asif Ali Zardari y los tres hijos del matrimonio, Bilawal, de 19 años, Bakhtawar, 17, y Aseefa, 14, juntaron sus manos y rezaron por el eterno descanso de su esposa y madre, Benazir. Fueron instantes, milésimas de segundo de silencio en un funeral que significó el último gran mitin de la líder del Partido Popular de Pakistán (PPP). Todo se asemejaba a su regreso del largo exilio hace dos meses a Karachi, pero esta vez era un adiós para siempre. Se repetían el gentío, las banderas tricolores del partido y los gritos contra el gobierno, pero en esta ocasión era una ambulancia blanca -no un autobús blindado- la que se abría paso entre una muchedumbre que desafío la alerta de posibles atentados para decir a adiós a su líder.El cortejo fúnebre apenas tuvo que recorrer siete kilómetros, siete kilómetros plagados de seguidores que aunque deseaban tocar el vehículo que transportaba los restos mortales. Envuelta con los colores rojo, verde y negro del PPP, el féretro recibió sepultura en el mausoleo que la familia tiene en el pueblecito de Garhi Khuda Bakhsh, próximo al lugar de donde vienen los Bhutto, que es el distrito de Larkana. Gestos de dolor y un solo grito, sordo y acusador dirigido contra el Presidente Pervez Musharraf y George Bush. «¿Vergüenza para el asesino Musharraf! ¿Vergüenza para el asesino Estados Unidos!» fueron algunos de los eslóganes más repetidos por los simpatizantes del PPP que se desplazaron en masa hasta el pueblo natal de Benazir. No hubo destacada presencia de políticos, ni de líderes de otras formaciones, fue el adiós de su gente, de nadie más. Y la organización fue instantánea. Se intentaron tomar las máximas medidas de seguridad ante el riesgo de un nuevo ataque, pero finalmente esta amenaza no se cumplió. Mientras en el sur del país se lanzaban gritos acusadores contra Musharraf y la gente pedía una investigación justa del atentado, en la capital, Islamabad, el portavoz de Interior, Javed Cheema, ofrecía una rueda de prensa para confirmar que tienen «pruebas irrefutables de que Al Qaida» es la autora del asesinato. Estas pruebas serían unas supuesta llamadas interceptadas a Baitula Mesud, uno de los líderes talibanes más buscados en Pakistán. Cheema aseguró que en el mensaje interceptado, Mesud felicita a sus guerrilleros por haber llevado a cabo el ataque con éxito. El portavoz de Interior también quiso adelantar que son también los hombres de Mesud los responsables del atentado que costó la vida a 139 personas en Karachi en la fiesta de bienvenida de Bhutto.Nadie en el funeral gritó contra Al Qaida, ni contra el terrorismo. Un detalle que siempre sorprende a muchos analistas internacionales, no a los paquistaníes. Las sospechas de los seguidores del PPP están más orientadas a la posible intervención de los servicios de inteligencia en los atentados contra su líder.EleccionesEl Ejecutivo no suspenderá las elecciones fijadas para el próximo 8 de enero y en las que Bhutto era la principal candidata a la victoria. Estas elecciones, que ya están bajo la amenaza de boicot de los principales grupos opositores, se desarrollarán además sin respetar los cuarenta días de luto marcados por el PPP como gesto de duelo ante la muerte de su líder.«Nunca he visto nada igual. Mira que hemos tenido golpes de Estado y cosas por el estilo, pero es la primera vez que todas las principales ciudades del país se levantan de esta manera», señalaba el analista político del Pakistán Observer, Mahmood Hussain.

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